La locomotora más antigua que conserva el Museo del Ferrocarril de Madrid fue la que comenzó el servicio entre Tardienta y Huesca. Posteriormente este ferrocarril fue absorbido por el de Zaragoza a Pamplona y Barcelona. Posteriormente, la Compañía del Norte la destinó a su base de Miranda de Ebro. En 1910 fue vendida a la Industrial Azucarera S.A. de Aranda de Duero y en 1968 esta empresa la donó a RENFE, para que una vez restaurada, pasara a ser parte de este Museo del Ferrocarril.
Fue construida en Inglaterra. En 1837 se creó en Newton-le-Willows (Inglaterra) la empresa Jones, Turner and Evans para fabricar locomotoras. Sus productos abastecieron a distintas empresas ferroviarias de Gran Bretaña. En 1844, Jones formó sociedad con Arthur Potts, pasando finalmente en 1863 a crear la empresa John Jones and Son. Es en este momento cuando suministró las dos locomotoras con las que comenzó su actividad la línea férrea Tardienta-Huesca.